El sabor esta vez han sido de violeta, por petición de mi hijo. Me ha sorprendido lo buenísimos que han quedado.
Bizcocho:
- 115 gr de mantequilla
- 200 gr de harina
- 1 y 1/2 cucharadita de levadura
- 120 ml de leche
- 2 cucharaditas de violeta en pasta.
Crema de mantequilla
- 250 gr de mantequilla
- 250 gr de azúcar glass
- 1 o 2 cucharaditas de leche
- 2 gotas de aroma de violetas
- Colorante verde, morado y naranja.
- Primero enciende el horno a 180º, arriba y abajo y colocamos los papelillos para los cupcakes en la bandeja.
- Tamiza la harina junto con la levadura.
- A continuación bate la mantequilla con el azúcar hasta que queden bien integrados.
- Echa los huevos uno a uno. Tienen que quedar bien mezclados con la masa anterior.
- Añade la mitad de la harina y bate, primero despacio y luego sube un poco la velocidad.
- Añade la leche y la violeta en pasta, mezcla bien.
- Añade el resto de la harina y bate un poco más hasta que todos los ingredientes estén bien integrados.
- La masa coge algo de color con la violeta en pasta, pero yo echo un poco de colorante morado.
- Echamos la masa en las cápsulas con la cuchara de helado, llenando a unos 3/4 aproximadamente.
- Por último introducimos la
bandeja en el horno durante unos 20 minutos. Depende del horno pero a mi
con este tiempo me quedan perfectos.
- Mientras los cupakes se hornean preparamos el frosting de mantequilla: Tamizamos el azúcar glass, y añadimos todos los ingredientes en el bol de la batidora. Bate primero a velocidad 1 para no llenar toda la cocina de azúcar y luego a velocidad máxima durante unos 5 minutos.
- Repartimos el frosting en 3 recipientes y en cada uno echamos colorante naranja, verde y morado. En los del cementerio he usado la boquilla de cesped; en el morado una rizada; y en la naranja una redonda.
- Cuando los cupcakes estén frios, colocamos una boquilla grande en la manga pastelera y a decorar.
- Para terminar montamos los cupcakes con la decoración que habremos hecho con antelación.
No hay comentarios:
Publicar un comentario